ARTICULO BUENISIMO SOBRE \" LAS SECA \" ( Merece l
Publicado: Dom Nov 09, 2008 12:29 am
Hola de nuevo a todos.
Aqui os dejo un curioso articulo sobre la enfermedad de \" la seca \" que no tiene desperdicio. Entiendo que debeis mirarlo porque habla de casos ocurridos a aficionados como nosotros, el porque aparece esta enfermedad, es decir las posibles causas de su aparición y la forma de remediarlo.
A ilustrarse todos !!!!!
Espero que os guste. Hasta ahora.
LA \"SECA\" ESE GRAVE PROBLEMA
Desde hace un tiempo algunos amigos que se dedican al silvestre, principalmente al Jilguero, me comentan los problemas que tienen para mantener en buen estado de salud y hasta con vida a sus jilgueros.
Uno de ellos Juan, me decía así: He terminado la temporada de caza y el 90 % de mis jilgueros se encuentran ligeramente embolados, tienen una perdida importante de masa muscular principalmente en el pecho, si les soplo en la zona del vientre este aparece sin ninguna muestra de grasa, con un aspecto rojizo y haciéndose visibles los intestinos a través de la piel, por otra parte el pájaro permanece constantemente rebuscando en el comedero y aparentemente comiendo, llegados a esta fase se observa una discreta e insidiosa diarrea que les lleva a la muerte en un plazo de ocho o diez dias.
He tratado a estos jilgueros con sulfamidas, cloranfenicol y tetraciclina, complejo vitamínico y probióticos y tras una aparente mejoría transcurridos unos veinte días reaparecen los síntomas y les sobreviene la muerte fulminante. Algunos a pesar del tratamiento ni siquiera manifiestan esa mejoría transitoria.
Otro de mis amigos Luis, me contaba: He conseguido que mis jilgueros se apareen, hagan el nido, incuben de modo adecuado y críen a sus pichones, pero los jilgueros nacidos ya se han independizado se van quedando cada vez más canijos y acaban por morir miserablemente, flacos y con la quilla como el filo de un cuchillo.
También me comentaba la gran mortandad de los jilgueros fruto de la caza del octubre pasado que redujo su número a un 3 % de supervivientes y exponiéndome en sus comentarios síntomas similares a los aportados por Juan.
Por otro lado Pedro, me decía así: En la temporada de caza de los jilgueros jóvenes me gusta enjaular individualmente un grupo para seleccionar los destaquen en el canto y concursar en su momento, pero... y acabó relatándome una historia calcada de lo que le sucedía a Juan.
Escuchando los comentarios de otros aficionados a los jilgueros, puedo deducir que en general existe un mayor o menor grado de dificultad en conseguir el éxito en el mantenimiento de estos bellos cantores.
Antes de continuar conviene decir que Juan hizo analizar en dos laboratorios distintos, los cadáveres de algunos de sus jilgueros fallecidos, allí le diagnosticaron coccidiosis, pero su extrañeza y desesperanza viene del echo de la ineficacia del tratamiento con sulfamidas y/o antibióticos recomendado por dichos laboratorios.
Llegados a este punto, me llaman poderosamente la atención dos circunstancias concretas.
A.- La ineficacia del tratamiento medicamentoso.
B.- La permanencia casi constante en el comedero rebuscando y aparentemente comiendo.
Mi reflexión al punto A. Es que en un principio el tratamiento si que es eficaz ante la infección de los gérmenes oportunistas (coccidios en este caso) pero ante una situación de estrés continuada, estos u otros gérmenes reinfectan a estos jilgueros ya debilitados y les llevan al desenlace fatal. Solo en un principio no es eficaz el tratamiento en aquellos ejemplares tan debilitados físicamente que no les es posible recuperarse.
Mi reflexión al punto B. Es que estos jilgueros afectados no aceptan la comida que se les está suministrando y por eso permanecen en el comedero rebuscando alguna semilla que sea de su agrado, no la encuentran y eso les incita a rebuscar mas y mas, solo de vez en cuando y forzados por el hambre comen algún que otro grano que no es suficiente para alimentarse y continua la rebusca, lo que les lleva a una delgadez progresiva y a la situación de estrés permanente que da ocasión a que los gérmenes ?oportunistas? infecten fatalmente a nuestros jilgueros. Esto sucede cuando se les suministra una mixtura inadecuada. Otro caso es cuando se opta por suministrarles ?alpiste a todo pasto? entonces nos encontramos con algunos jilgueros que no lo aceptan como bueno y encontramos en el comedero gran número de semillas de alpiste pelado que no ha sido consumido, otras veces lo que encontramos es que gran parte de las semillas de alpiste han sido reducidas a harina, todo esto acaba por provocar la delgadez y la temida situación de estrés.
¿Qué podemos hacer para remediar la crisis?
En primer lugar hagamos un análisis de que es lo que nuestros jilgueros comen cuando están en libertad.
Mis observaciones en el campo son que comen las semillas algunas veces inmaduras y otras no y también partes de algunas de las plantas que cito a continuación:
Achicoria silvestre (Cichorium intibus)
Bolsa de pastor (Capsella bursa pastoris)
Cardo de diversas especies(Carduus, defloratus, personata, Cirsium vulgare, etc,...)
Cerraja o llisón (Sonchus oleraceus)
Diente de león (Leontodon, Taraxacum...)
Jaramago o rabanicia (Diplotaxis, tenuifolia, viminea, muralis, elicoides)
Llantén (Plantago, mayor, media )
Olivardilla (Senecio viscosus)
Ortiga (Lamium, album, maculatum, Hybridum,...)
Pamplina o hierba pajarera (Stellaria media)
Romero (Rosmarinus officinalis)
Yerba cana (Senecio vulgaris)
Estas entre otras plantas silvestres y además de entre las cultivadas es frecuente ver consumir las semillas del cáñamo, pipas de girasol (pequeño), lechuga, rábano, col, escarola, achicoria,...
Una simple y curiosa observación es que estas semillas no son pertenecientes a yerbas sin tallo como lo son las gramíneas (trigo, céspedes, mijos, alpiste...) en todas las consumidas, absolutamente en todas, predominan las semillas ricas en proteínas y en grasas y bajas en hidratos de carbono.
¿Porqué, no escogemos una alimentación que se aproxime lo más posible, a la que llevan en libertad nuestros jilgueros?
Yo ya lo vengo haciendo desde hace muchos años y no tengo problemas de ?seca?.
La pauta que a continuación expongo es la que yo sigo actualmente en relación con mis jilgueros y puedo asegurar a tenor de los resultados que es una buena pauta de conducta.
Cuando los jilgueros llegan a mi casa procedentes de la caza, sea la temporada del joven en verano o de la ?pasa? en octubre, someto a cuarentena a todos los ejemplares consistente en suministrar como antiestrés en el agua de bebida, una solución de Terramicina con vitaminas para pollitos y pájaros a la concentración de una medida rasa por cada dos litros de agua, durante 7 días. Pasados 10 días les suministro una dosis de Levamisol también en el agua de bebida a razón de 2 gotas por cada 40 c.c. de agua y durante un solo día y desde el primer momento he puesto a su disposición la mezcla de semillas, que más adelante os comento, para su alimentación diaria y permanente.
Estas son las semillas y la cantidad de cada una:
AVENA pelada.................................... 250 gr
CAÑAMÓN pequeño.......................... 250 gr
CARDÓN............................................ 250 gr
ESCAROLA........................................ 250 gr
LECHUGA blanca............................... 125 gr
LECHUGA negra................................ 125 gr
NEGRILLO......................................... 250 gr
PERILLA blanca...............................1.000 gr
Mezclar bien todos los granos para obtener una mixtura homogénea y todos los días soplar los comederos para eliminar las peladuras que ocasionalmente pueden tapar las semillas sin consumir, que nos puedan llevar a la creencia de que los comederos están llenos de comida cuando en realidad lo que están es llenos de desperdicios no aprovechables.
En comedero aparte suministrar alpiste por si alguno lo quiere consumir, pero de ningún modo hay que forzarles a que lo coman.
También se les debe suministrar ?verde? dos o tres días a la semana y que puede ser lechuga, escarola, acelgas o manzana. No suministrarles espinacas pues debido a su alto contenido en ácido oxálico les es perjudicial.
Con estas recomendaciones tan sencillas, vuestros jilgueros estarán libres del peligro de contraer la ?seca? esa enfermedad que no es tal y que tan graves problemas acarrea.
Si habéis tenido la paciencia de leerme os lo agradezco.
José Serrano Martínez
Socio de la A.O.P.V.</P
Desde hace un tiempo algunos amigos que se dedican al silvestre, principalmente al Jilguero, me comentan los problemas que tienen para mantener en buen estado de salud y hasta con vida a sus jilgueros.
Uno de ellos Juan, me decía así: He terminado la temporada de caza y el 90 % de mis jilgueros se encuentran ligeramente embolados, tienen una perdida importante de masa muscular principalmente en el pecho, si les soplo en la zona del vientre este aparece sin ninguna muestra de grasa, con un aspecto rojizo y haciéndose visibles los intestinos a través de la piel, por otra parte el pájaro permanece constantemente rebuscando en el comedero y aparentemente comiendo, llegados a esta fase se observa una discreta e insidiosa diarrea que les lleva a la muerte en un plazo de ocho o diez días.
He tratado a estos jilgueros con sulfamidas, cloranfenicol y tetraciclina, complejo vitamínico y probióticos y tras una aparente mejoría transcurridos unos veinte días reaparecen los síntomas y les sobreviene la muerte fulminante. Algunos a pesar del tratamiento ni siquiera manifiestan esa mejoría transitoria.
Otro de mis amigos Luis, me contaba: He conseguido que mis jilgueros se apareen, hagan el nido, incuben de modo adecuado y críen a sus pichones, pero los jilgueros nacidos ya se han independizado se van quedando cada vez más canijos y acaban por morir miserablemente, flacos y con la quilla como el filo de un cuchillo.
También me comentaba la gran mortandad de los jilgueros fruto de la caza del octubre pasado que redujo su número a un 3 % de supervivientes y exponiéndome en sus comentarios síntomas similares a los aportados por Juan.
Por otro lado Pedro, me decía así: En la temporada de caza de los jilgueros jóvenes me gusta enjaular individualmente un grupo para seleccionar los destaquen en el canto y concursar en su momento, pero... y acabó relatándome una historia calcada de lo que le sucedía a Juan.
Escuchando los comentarios de otros aficionados a los jilgueros, puedo deducir que en general existe un mayor o menor grado de dificultad en conseguir el éxito en el mantenimiento de estos bellos cantores.
Antes de continuar conviene decir que Juan hizo analizar en dos laboratorios distintos, los cadáveres de algunos de sus jilgueros fallecidos, allí le diagnosticaron coccidiosis, pero su extrañeza y desesperanza viene del echo de la ineficacia del tratamiento con sulfamidas y/o antibióticos recomendado por dichos laboratorios.
Llegados a este punto, me llaman poderosamente la atención dos circunstancias concretas.
A.- La ineficacia del tratamiento medicamentoso.
B.- La permanencia casi constante en el comedero rebuscando y aparentemente comiendo.
Mi reflexión al punto A. Es que en un principio el tratamiento si que es eficaz ante la infección de los gérmenes oportunistas (coccidios en este caso) pero ante una situación de estrés continuada, estos u otros gérmenes reinfectan a estos jilgueros ya debilitados y les llevan al desenlace fatal. Solo en un principio no es eficaz el tratamiento en aquellos ejemplares tan debilitados físicamente que no les es posible recuperarse.
Mi reflexión al punto B. Es que estos jilgueros afectados no aceptan la comida que se les está suministrando y por eso permanecen en el comedero rebuscando alguna semilla que sea de su agrado, no la encuentran y eso les incita a rebuscar mas y mas, solo de vez en cuando y forzados por el hambre comen algún que otro grano que no es suficiente para alimentarse y continua la rebusca, lo que les lleva a una delgadez progresiva y a la situación de estrés permanente que da ocasión a que los gérmenes \"oportunistas\" infecten fatalmente a nuestros jilgueros. Esto sucede cuando se les suministra una mixtura inadecuada. Otro caso es cuando se opta por suministrarles alpiste \"a todo pasto\" entonces nos encontramos con algunos jilgueros que no lo aceptan como bueno y encontramos en el comedero gran número de semillas de alpiste pelado que no ha sido consumido, otras veces lo que encontramos es que gran parte de las semillas de alpiste han sido reducidas a harina, todo esto acaba por provocar la delgadez y la temida situación de estrés.
¿Qué podemos hacer para remediar la crisis?
En primer lugar hagamos un análisis de que es lo que nuestros jilgueros comen cuando están en libertad.
Mis observaciones en el campo son que comen las semillas algunas veces inmaduras y otras no y también partes de algunas de las plantas que cito a continuación:
Achicoria silvestre (Cichorium intibus)
Bolsa de pastor (Capsella bursa pastoris)
Cardo de diversas especies(Carduus, defloratus, personata, Cirsium vulgare, etc,...)
Cerraja o llisón (Sonchus oleraceus)
Diente de león (Leontodon, Taraxacum...)
Jaramago o rabanicia (Diplotaxis, tenuifolia, viminea, muralis, elicoides)
Llantén (Plantago, mayor, media )
Olivardilla (Senecio viscosus)
Ortiga (Lamium, album, maculatum, Hybridum,...)
Pamplina o hierba pajarera (Stellaria media)
Romero (Rosmarinus officinalis)
Yerba cana (Senecio vulgaris)
Estas entre otras plantas silvestres y además de entre las cultivadas es frecuente ver consumir las semillas del cáñamo, pipas de girasol (pequeño), lechuga, rábano, col, escarola, achicoria,...
Una simple y curiosa observación es que estas semillas no son pertenecientes a yerbas sin tallo como lo son las gramíneas (trigo, céspedes, mijos, alpiste...) en todas las consumidas, absolutamente en todas, predominan las semillas ricas en proteínas y en grasas y bajas en hidratos de carbono.
¿Porqué, no escogemos una alimentación que se aproxime lo más posible, a la que llevan en libertad nuestros jilgueros?
Yo ya lo vengo haciendo desde hace muchos años y no tengo problemas de \"seca\".
La pauta que a continuación expongo es la que yo sigo actualmente en relación con mis jilgueros y puedo asegurar a tenor de los resultados que es una buena pauta de conducta.
Cuando los jilgueros llegan a mi casa procedentes de la caza, sea la temporada del joven en verano o de la \"pasa\" en octubre, someto a cuarentena a todos los ejemplares consistente en suministrar como antiestrés en el agua de bebida, una solución de Terramicina con vitaminas para pollitos y pájaros a la concentración de una medida rasa por cada dos litros de agua, durante 7 días. Pasados 10 días les suministro una dosis de Levamisol también en el agua de bebida a razón de 2 gotas por cada 40 c.c. de agua y durante un solo día y desde el primer momento he puesto a su disposición la mezcla de semillas, que más adelante os comento, para su alimentación diaria y permanente.
Estas son las semillas y la cantidad de cada una:
AVENA pelada.................................... 250 gr
CAÑAMÓN pequeño.......................... 250 gr
CARDÓN............................................ 250 gr
ESCAROLA........................................ 250 gr
LECHUGA blanca............................... 125 gr
LECHUGA negra................................ 125 gr
NEGRILLO......................................... 250 gr
PERILLA blanca...............................1.000 gr
Mezclar bien todos los granos para obtener una mixtura homogénea y todos los días soplar los comederos para eliminar las peladuras que ocasionalmente pueden tapar las semillas sin consumir, que nos puedan llevar a la creencia de que los comederos están llenos de comida cuando en realidad lo que están es llenos de desperdicios no aprovechables.
En comedero aparte suministrar alpiste por si alguno lo quiere consumir, pero de ningún modo hay que forzarles a que lo coman.
También se les debe suministrar \"verde\" dos o tres días a la semana y que puede ser lechuga, escarola, acelgas o manzana. No suministrarles espinacas pues debido a su alto contenido en ácido oxálico les es perjudicial.
Con estas recomendaciones tan sencillas, vuestros jilgueros estarán libres del peligro de contraer la \"seca\" esa enfermedad que no es tal y que tan graves problemas acarrea.
Aqui os dejo un curioso articulo sobre la enfermedad de \" la seca \" que no tiene desperdicio. Entiendo que debeis mirarlo porque habla de casos ocurridos a aficionados como nosotros, el porque aparece esta enfermedad, es decir las posibles causas de su aparición y la forma de remediarlo.
A ilustrarse todos !!!!!
Espero que os guste. Hasta ahora.
LA \"SECA\" ESE GRAVE PROBLEMA
Desde hace un tiempo algunos amigos que se dedican al silvestre, principalmente al Jilguero, me comentan los problemas que tienen para mantener en buen estado de salud y hasta con vida a sus jilgueros.
Uno de ellos Juan, me decía así: He terminado la temporada de caza y el 90 % de mis jilgueros se encuentran ligeramente embolados, tienen una perdida importante de masa muscular principalmente en el pecho, si les soplo en la zona del vientre este aparece sin ninguna muestra de grasa, con un aspecto rojizo y haciéndose visibles los intestinos a través de la piel, por otra parte el pájaro permanece constantemente rebuscando en el comedero y aparentemente comiendo, llegados a esta fase se observa una discreta e insidiosa diarrea que les lleva a la muerte en un plazo de ocho o diez dias.
He tratado a estos jilgueros con sulfamidas, cloranfenicol y tetraciclina, complejo vitamínico y probióticos y tras una aparente mejoría transcurridos unos veinte días reaparecen los síntomas y les sobreviene la muerte fulminante. Algunos a pesar del tratamiento ni siquiera manifiestan esa mejoría transitoria.
Otro de mis amigos Luis, me contaba: He conseguido que mis jilgueros se apareen, hagan el nido, incuben de modo adecuado y críen a sus pichones, pero los jilgueros nacidos ya se han independizado se van quedando cada vez más canijos y acaban por morir miserablemente, flacos y con la quilla como el filo de un cuchillo.
También me comentaba la gran mortandad de los jilgueros fruto de la caza del octubre pasado que redujo su número a un 3 % de supervivientes y exponiéndome en sus comentarios síntomas similares a los aportados por Juan.
Por otro lado Pedro, me decía así: En la temporada de caza de los jilgueros jóvenes me gusta enjaular individualmente un grupo para seleccionar los destaquen en el canto y concursar en su momento, pero... y acabó relatándome una historia calcada de lo que le sucedía a Juan.
Escuchando los comentarios de otros aficionados a los jilgueros, puedo deducir que en general existe un mayor o menor grado de dificultad en conseguir el éxito en el mantenimiento de estos bellos cantores.
Antes de continuar conviene decir que Juan hizo analizar en dos laboratorios distintos, los cadáveres de algunos de sus jilgueros fallecidos, allí le diagnosticaron coccidiosis, pero su extrañeza y desesperanza viene del echo de la ineficacia del tratamiento con sulfamidas y/o antibióticos recomendado por dichos laboratorios.
Llegados a este punto, me llaman poderosamente la atención dos circunstancias concretas.
A.- La ineficacia del tratamiento medicamentoso.
B.- La permanencia casi constante en el comedero rebuscando y aparentemente comiendo.
Mi reflexión al punto A. Es que en un principio el tratamiento si que es eficaz ante la infección de los gérmenes oportunistas (coccidios en este caso) pero ante una situación de estrés continuada, estos u otros gérmenes reinfectan a estos jilgueros ya debilitados y les llevan al desenlace fatal. Solo en un principio no es eficaz el tratamiento en aquellos ejemplares tan debilitados físicamente que no les es posible recuperarse.
Mi reflexión al punto B. Es que estos jilgueros afectados no aceptan la comida que se les está suministrando y por eso permanecen en el comedero rebuscando alguna semilla que sea de su agrado, no la encuentran y eso les incita a rebuscar mas y mas, solo de vez en cuando y forzados por el hambre comen algún que otro grano que no es suficiente para alimentarse y continua la rebusca, lo que les lleva a una delgadez progresiva y a la situación de estrés permanente que da ocasión a que los gérmenes ?oportunistas? infecten fatalmente a nuestros jilgueros. Esto sucede cuando se les suministra una mixtura inadecuada. Otro caso es cuando se opta por suministrarles ?alpiste a todo pasto? entonces nos encontramos con algunos jilgueros que no lo aceptan como bueno y encontramos en el comedero gran número de semillas de alpiste pelado que no ha sido consumido, otras veces lo que encontramos es que gran parte de las semillas de alpiste han sido reducidas a harina, todo esto acaba por provocar la delgadez y la temida situación de estrés.
¿Qué podemos hacer para remediar la crisis?
En primer lugar hagamos un análisis de que es lo que nuestros jilgueros comen cuando están en libertad.
Mis observaciones en el campo son que comen las semillas algunas veces inmaduras y otras no y también partes de algunas de las plantas que cito a continuación:
Achicoria silvestre (Cichorium intibus)
Bolsa de pastor (Capsella bursa pastoris)
Cardo de diversas especies(Carduus, defloratus, personata, Cirsium vulgare, etc,...)
Cerraja o llisón (Sonchus oleraceus)
Diente de león (Leontodon, Taraxacum...)
Jaramago o rabanicia (Diplotaxis, tenuifolia, viminea, muralis, elicoides)
Llantén (Plantago, mayor, media )
Olivardilla (Senecio viscosus)
Ortiga (Lamium, album, maculatum, Hybridum,...)
Pamplina o hierba pajarera (Stellaria media)
Romero (Rosmarinus officinalis)
Yerba cana (Senecio vulgaris)
Estas entre otras plantas silvestres y además de entre las cultivadas es frecuente ver consumir las semillas del cáñamo, pipas de girasol (pequeño), lechuga, rábano, col, escarola, achicoria,...
Una simple y curiosa observación es que estas semillas no son pertenecientes a yerbas sin tallo como lo son las gramíneas (trigo, céspedes, mijos, alpiste...) en todas las consumidas, absolutamente en todas, predominan las semillas ricas en proteínas y en grasas y bajas en hidratos de carbono.
¿Porqué, no escogemos una alimentación que se aproxime lo más posible, a la que llevan en libertad nuestros jilgueros?
Yo ya lo vengo haciendo desde hace muchos años y no tengo problemas de ?seca?.
La pauta que a continuación expongo es la que yo sigo actualmente en relación con mis jilgueros y puedo asegurar a tenor de los resultados que es una buena pauta de conducta.
Cuando los jilgueros llegan a mi casa procedentes de la caza, sea la temporada del joven en verano o de la ?pasa? en octubre, someto a cuarentena a todos los ejemplares consistente en suministrar como antiestrés en el agua de bebida, una solución de Terramicina con vitaminas para pollitos y pájaros a la concentración de una medida rasa por cada dos litros de agua, durante 7 días. Pasados 10 días les suministro una dosis de Levamisol también en el agua de bebida a razón de 2 gotas por cada 40 c.c. de agua y durante un solo día y desde el primer momento he puesto a su disposición la mezcla de semillas, que más adelante os comento, para su alimentación diaria y permanente.
Estas son las semillas y la cantidad de cada una:
AVENA pelada.................................... 250 gr
CAÑAMÓN pequeño.......................... 250 gr
CARDÓN............................................ 250 gr
ESCAROLA........................................ 250 gr
LECHUGA blanca............................... 125 gr
LECHUGA negra................................ 125 gr
NEGRILLO......................................... 250 gr
PERILLA blanca...............................1.000 gr
Mezclar bien todos los granos para obtener una mixtura homogénea y todos los días soplar los comederos para eliminar las peladuras que ocasionalmente pueden tapar las semillas sin consumir, que nos puedan llevar a la creencia de que los comederos están llenos de comida cuando en realidad lo que están es llenos de desperdicios no aprovechables.
En comedero aparte suministrar alpiste por si alguno lo quiere consumir, pero de ningún modo hay que forzarles a que lo coman.
También se les debe suministrar ?verde? dos o tres días a la semana y que puede ser lechuga, escarola, acelgas o manzana. No suministrarles espinacas pues debido a su alto contenido en ácido oxálico les es perjudicial.
Con estas recomendaciones tan sencillas, vuestros jilgueros estarán libres del peligro de contraer la ?seca? esa enfermedad que no es tal y que tan graves problemas acarrea.
Si habéis tenido la paciencia de leerme os lo agradezco.
José Serrano Martínez
Socio de la A.O.P.V.</P
Desde hace un tiempo algunos amigos que se dedican al silvestre, principalmente al Jilguero, me comentan los problemas que tienen para mantener en buen estado de salud y hasta con vida a sus jilgueros.
Uno de ellos Juan, me decía así: He terminado la temporada de caza y el 90 % de mis jilgueros se encuentran ligeramente embolados, tienen una perdida importante de masa muscular principalmente en el pecho, si les soplo en la zona del vientre este aparece sin ninguna muestra de grasa, con un aspecto rojizo y haciéndose visibles los intestinos a través de la piel, por otra parte el pájaro permanece constantemente rebuscando en el comedero y aparentemente comiendo, llegados a esta fase se observa una discreta e insidiosa diarrea que les lleva a la muerte en un plazo de ocho o diez días.
He tratado a estos jilgueros con sulfamidas, cloranfenicol y tetraciclina, complejo vitamínico y probióticos y tras una aparente mejoría transcurridos unos veinte días reaparecen los síntomas y les sobreviene la muerte fulminante. Algunos a pesar del tratamiento ni siquiera manifiestan esa mejoría transitoria.
Otro de mis amigos Luis, me contaba: He conseguido que mis jilgueros se apareen, hagan el nido, incuben de modo adecuado y críen a sus pichones, pero los jilgueros nacidos ya se han independizado se van quedando cada vez más canijos y acaban por morir miserablemente, flacos y con la quilla como el filo de un cuchillo.
También me comentaba la gran mortandad de los jilgueros fruto de la caza del octubre pasado que redujo su número a un 3 % de supervivientes y exponiéndome en sus comentarios síntomas similares a los aportados por Juan.
Por otro lado Pedro, me decía así: En la temporada de caza de los jilgueros jóvenes me gusta enjaular individualmente un grupo para seleccionar los destaquen en el canto y concursar en su momento, pero... y acabó relatándome una historia calcada de lo que le sucedía a Juan.
Escuchando los comentarios de otros aficionados a los jilgueros, puedo deducir que en general existe un mayor o menor grado de dificultad en conseguir el éxito en el mantenimiento de estos bellos cantores.
Antes de continuar conviene decir que Juan hizo analizar en dos laboratorios distintos, los cadáveres de algunos de sus jilgueros fallecidos, allí le diagnosticaron coccidiosis, pero su extrañeza y desesperanza viene del echo de la ineficacia del tratamiento con sulfamidas y/o antibióticos recomendado por dichos laboratorios.
Llegados a este punto, me llaman poderosamente la atención dos circunstancias concretas.
A.- La ineficacia del tratamiento medicamentoso.
B.- La permanencia casi constante en el comedero rebuscando y aparentemente comiendo.
Mi reflexión al punto A. Es que en un principio el tratamiento si que es eficaz ante la infección de los gérmenes oportunistas (coccidios en este caso) pero ante una situación de estrés continuada, estos u otros gérmenes reinfectan a estos jilgueros ya debilitados y les llevan al desenlace fatal. Solo en un principio no es eficaz el tratamiento en aquellos ejemplares tan debilitados físicamente que no les es posible recuperarse.
Mi reflexión al punto B. Es que estos jilgueros afectados no aceptan la comida que se les está suministrando y por eso permanecen en el comedero rebuscando alguna semilla que sea de su agrado, no la encuentran y eso les incita a rebuscar mas y mas, solo de vez en cuando y forzados por el hambre comen algún que otro grano que no es suficiente para alimentarse y continua la rebusca, lo que les lleva a una delgadez progresiva y a la situación de estrés permanente que da ocasión a que los gérmenes \"oportunistas\" infecten fatalmente a nuestros jilgueros. Esto sucede cuando se les suministra una mixtura inadecuada. Otro caso es cuando se opta por suministrarles alpiste \"a todo pasto\" entonces nos encontramos con algunos jilgueros que no lo aceptan como bueno y encontramos en el comedero gran número de semillas de alpiste pelado que no ha sido consumido, otras veces lo que encontramos es que gran parte de las semillas de alpiste han sido reducidas a harina, todo esto acaba por provocar la delgadez y la temida situación de estrés.
¿Qué podemos hacer para remediar la crisis?
En primer lugar hagamos un análisis de que es lo que nuestros jilgueros comen cuando están en libertad.
Mis observaciones en el campo son que comen las semillas algunas veces inmaduras y otras no y también partes de algunas de las plantas que cito a continuación:
Achicoria silvestre (Cichorium intibus)
Bolsa de pastor (Capsella bursa pastoris)
Cardo de diversas especies(Carduus, defloratus, personata, Cirsium vulgare, etc,...)
Cerraja o llisón (Sonchus oleraceus)
Diente de león (Leontodon, Taraxacum...)
Jaramago o rabanicia (Diplotaxis, tenuifolia, viminea, muralis, elicoides)
Llantén (Plantago, mayor, media )
Olivardilla (Senecio viscosus)
Ortiga (Lamium, album, maculatum, Hybridum,...)
Pamplina o hierba pajarera (Stellaria media)
Romero (Rosmarinus officinalis)
Yerba cana (Senecio vulgaris)
Estas entre otras plantas silvestres y además de entre las cultivadas es frecuente ver consumir las semillas del cáñamo, pipas de girasol (pequeño), lechuga, rábano, col, escarola, achicoria,...
Una simple y curiosa observación es que estas semillas no son pertenecientes a yerbas sin tallo como lo son las gramíneas (trigo, céspedes, mijos, alpiste...) en todas las consumidas, absolutamente en todas, predominan las semillas ricas en proteínas y en grasas y bajas en hidratos de carbono.
¿Porqué, no escogemos una alimentación que se aproxime lo más posible, a la que llevan en libertad nuestros jilgueros?
Yo ya lo vengo haciendo desde hace muchos años y no tengo problemas de \"seca\".
La pauta que a continuación expongo es la que yo sigo actualmente en relación con mis jilgueros y puedo asegurar a tenor de los resultados que es una buena pauta de conducta.
Cuando los jilgueros llegan a mi casa procedentes de la caza, sea la temporada del joven en verano o de la \"pasa\" en octubre, someto a cuarentena a todos los ejemplares consistente en suministrar como antiestrés en el agua de bebida, una solución de Terramicina con vitaminas para pollitos y pájaros a la concentración de una medida rasa por cada dos litros de agua, durante 7 días. Pasados 10 días les suministro una dosis de Levamisol también en el agua de bebida a razón de 2 gotas por cada 40 c.c. de agua y durante un solo día y desde el primer momento he puesto a su disposición la mezcla de semillas, que más adelante os comento, para su alimentación diaria y permanente.
Estas son las semillas y la cantidad de cada una:
AVENA pelada.................................... 250 gr
CAÑAMÓN pequeño.......................... 250 gr
CARDÓN............................................ 250 gr
ESCAROLA........................................ 250 gr
LECHUGA blanca............................... 125 gr
LECHUGA negra................................ 125 gr
NEGRILLO......................................... 250 gr
PERILLA blanca...............................1.000 gr
Mezclar bien todos los granos para obtener una mixtura homogénea y todos los días soplar los comederos para eliminar las peladuras que ocasionalmente pueden tapar las semillas sin consumir, que nos puedan llevar a la creencia de que los comederos están llenos de comida cuando en realidad lo que están es llenos de desperdicios no aprovechables.
En comedero aparte suministrar alpiste por si alguno lo quiere consumir, pero de ningún modo hay que forzarles a que lo coman.
También se les debe suministrar \"verde\" dos o tres días a la semana y que puede ser lechuga, escarola, acelgas o manzana. No suministrarles espinacas pues debido a su alto contenido en ácido oxálico les es perjudicial.
Con estas recomendaciones tan sencillas, vuestros jilgueros estarán libres del peligro de contraer la \"seca\" esa enfermedad que no es tal y que tan graves problemas acarrea.